Step 1
JIMADO
Se extrae de una clase de agave conocida como lechuguilla (Agave maximiliana haw). Para aprovechar esta planta, se espera de 8 a 20 años hasta que madura. Durante este tiempo, la planta acumula azúcares esenciales para el proceso de fermentación. Pasado ese tiempo, se corta el quiote (flor) y las hojas, y se procede con su cocción.
Step 2
BAKED
Luego, se cocina en un horno de mampostería tipo pan. Este horno tiene una puerta frontal para introducir leña y otra puerta trasera elevada para colocar el corazón de la lechuguilla. Después de sellar el horno con barro, se deja cocer el agave durante 72 horas. Una vez transcurrido ese tiempo, se abre el horno y se retira el agave.
Step 3
Grinding
Una vez cocido, el corazón se extrae cuidadosamente del horno y se machaca en una pieza de madera en forma de canoa. Después, se coloca en grandes tinas de madera para iniciar la fermentación. Este paso es esencial en la producción de mezcal, ya que transforma los azúcares del agave en alcohol, contribuyendo así a su sabor distintivo.
Step 4
FERMENTED
El cuarto de fermentación es esencial en la producción de raicilla. Durante un período de 5 a 8 días, el líquido fermenta, adaptándose al clima local. Aquí, los microorganismos convierten el azúcar en alcohol, creando las propiedades organolépticas únicas de la raicilla. Este proceso es el corazón de la elaboración, asegurando la calidad y el sabor distintivo del producto final.
Step 5
Distillate
Nuestros destiladores árabe-mexicanos, con serpentín de cobre y acero inoxidable, son esenciales para destilar raicilla, eliminando alcoholes no deseados como el metanol. Usando leña de encino de árboles secos naturalmente, se destila a fuego lento, produciendo un líquido cristalino de más de 45 grados de alcohol. Dos destilaciones garantizan el perfil deseado.
Step 6
BOTTLING
Antes de embotellarlo, permitimos que la raicilla madure durante varias semanas en vidrio para favorecer el desarrollo de su cuerpo y la integración de sus complejos aromas y sabores. Luego, realizamos una cuidadosa y meticulosa filtración para eliminar cualquier impureza no deseada antes de envasarlo en botellas selladas con una garantía de calidad y autenticidad, asegurando así un producto final superior.
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